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¿Por qué utilizar acero con revestimiento metálico?
El revestimiento metálico del acero es un método de protección rentable, especialmente si se compara con el uso de acero inoxidable. También ofrece ventajas para el medioambiente, ya que no genera emisiones y garantiza un uso prácticamente sin necesidad de mantenimiento. Se suele utilizar en estado sin pintar, pero cuando se pinta, la pintura tendrá muy buena adhesión a la superficie de zinc.
Al ser el zinc un metal de sacrificio, el revestimiento metálico también proporciona protección contra la corrosión en zonas donde la superficie del acero queda expuesta como, por ejemplo, bordes cortados y zonas donde arañazos o impactos hayan dañado el revestimiento. Incluso se logra una protección total contra la corrosión en zonas que se han conformado en exceso debido a la baja tendencia al descascarillado de este recubrimiento de baja fricción que presenta una sólida unión a su sustrato.
Acero galvanizado
¿Dónde se utiliza el acero galvanizado?
El acero galvanizado se utiliza en todo, desde tuercas y pernos hasta torres de líneas eléctricas y otras infraestructuras a gran escala. Las carrocerías de los automóviles modernos se galvanizan completamente, prolongando así su vida útil sin que se oxiden. En la industria agrícola se hace un uso extensivo de chapas y tuberías de metal galvanizado para portillos, barreras y cercados para ganado y mucho más.
También ocurre en la industria de la construcción, donde se utilizan grandes cantidades de acero galvanizado en infraestructuras tales como instalaciones de ventilación, calefacción y eléctricas. Su uso se amplía además a balcones, escaleras, canaletas, rieles, tuberías y pasarelas. Su estética también es otro factor que lo convierte en uno de los materiales favoritos de muchos arquitectos.
450 °C
La temperatura a la que se sumerge la base de acero en un baño de acero fundido
80 años
Vida útil posible del revestimiento Z600 (espesor de 42 µm en ambos lados)
>99%
El revestimiento se compone casi en su totalidad de zinc
Métodos de galvanización
Galvanizado por inmersión en caliente con zinc
El galvanizado por inmersión en caliente crea una capa gruesa y resistente de aleación de zinc-hierro en la superficie del producto de acero. Este proceso de inmersión en caliente normalmente no afecta a la resistencia del metal base, excepto en el caso de los aceros de alta resistencia, ya que la fragilización por hidrógeno puede provocar problemas.
En el proceso de galvanizado por inmersión en caliente el metal base se sumerge en un baño de zinc fundido a una temperatura aproximada de 450 °C. El zinc se alea con la superficie del acero y crea una superficie de color gris mate que protege el acero contra la corrosión.
El acero galvanizado por inmersión en caliente ofrece una amplia gama de protecciones —Z100 a Z600—, así como una fuerte unión entre el revestimiento por inmersión en caliente y el acero. Este es el motivo por el que los revestimientos de zinc son adecuados para el conformado.
La composición del revestimiento de zinc es básicamente zinc (>99 %) y no contiene plomo, y la apariencia visual son estrellas cristalinas de zinc que ofrece un aspecto muy estético. La resistencia contra la corrosión proporcionada por el revestimiento de zinc está estrechamente relacionada con el espesor del revestimiento. El revestimiento de Z600 (42 μm en ambos lados) puede prolongar la vida útil hasta alcanzar los 80 años.
Revestimiento galvano-recocido (galvannealed) que aporta al acero una protección excelente contra la corrosión
La producción de chapa de acero con revestimiento galvano-recocido (galvannealed) comienza con la galvanización en caliente de la chapa de acero. Después de galvanizar la chapa de acero por inmersión en zinc, esta se calienta en el horno de recocido durante unos segundos. Esto hace que las capas de hierro y zinc se fundan creando capas de aleación de zinc-hierro en la superficie. La solución de galvanización contiene aluminio en una proporción ligeramente superior al 0,1% que sirve para unir las capas de hierro y zinc utilizado como revestimiento. Las temperaturas de recocido alcanzan aproximadamente los 500-565 °C.
El revestimiento galvano-recocido (ZF) presenta unas propiedades excelentes para la soldadura por puntos, lo que ofrece como resultado una prolongación de la vida útil y un menor agarrotamiento de los electrodos. La superficie de la chapa de acero galvano-recocida presenta una estructura fina que, a su vez, aporta una apariencia atractiva a la superficie pintada así como una fuerte adhesión de la pintura.
El revestimiento de Galfan mejora la conformabilidad y la resistencia a la corrosión
Galfan (ZA) es un revestimiento de aleación de zinc y aluminio que proporciona unas excelentes propiedades de protección contra la corrosión y de conformado en comparación con el revestimiento de zinc tradicional.
El acero con revestimiento de Galfan proporciona una excelente resistencia contra la corrosión en comparación con el revestimiento de zinc tradicional. Este es el motivo por el que se puede utilizar para prolongar la vida útil de una pieza de acero o para sustituir un revestimiento de zinc tradicional por otro más fino de Galfan mejorando así simultáneamente las propiedades de soldabilidad y conformabilidad.
El revestimiento de Galfan presenta una superficie característica con un brillo metálico y un patrón en forma de célula. La composición eutéctica de un 95% de zinc y un 5% de aluminio mejora su adhesión y crea una estructura lamelar a escala microscópica. que lo convierte en un revestimiento dúctil e ideal para embutición profunda.
Productos
Acero Docol® AHSS con revestimiento metálico
SSAB ofrece una selección completa de revestimientos de Galfan®, galvanizados por inmersión en caliente, galvano-recocidos (galvannealed) y electrogalvanizados para la protección contra la corrosión en un gran número de sus calidades de acero AHSS Docol® para la industria automotriz.
Acero Domex® HSLA y estructural con revestimiento metálico de SSAB
El acero Domex® de SSAB se entrega como fleje, tubo y sección laminados en caliente. También está disponible en calidades con distintos revestimiento metálicos para resistir a la corrosión, como revestimientos de zinc, Galfan y galvano-recocidos.
Aceros SSAB Form con revestimiento metálico
SSAB Form está disponible en una amplia gama de calidades, lo que facilita optimizar los procesos de fabricación y la calidad del producto final. SSAB Form se entrega como fleje laminado en caliente, fleje laminado en frío, calidades con revestimiento metálico y tubos. El estado de entrega puede ser con o sin protección superficial contra la corrosión.